Con tantos años de antigüedad
Nehemías, copero del Rey Artajerjes, uno de los reyes más tiranos, frente a la
situación de su Nación de haber sido desbastada, se presenta en oración y ayuno
ante a Dios, para rogar perdón por los pecados del pueblo, reconociendo que el
estado de su Pueblo es consecuencia de haber olvidado a Dios, de haber menospreciado
lo que Él estableció; de haberse alejado de las leyes de Dios. Igual que esta
Nación estamos en la actualidad en este mundo, naciones que se proclamaban católicas,
protestantes, hoy día se han desentendido de las enseñanzas de Dios, de sus
leyes. Más aun en esta ilusoria autonomía se camina a la auto destrucción, lo
vemos en las noticias de cada día, crece la violencia, la inseguridad, la
perversión, la pérdida de valores, etc. Pero aún hay esperanza, en la grandeza
del amor de Dios nos dejó las instrucciones: si se humillare mi pueblo, sobre
el cual mi nombre es invocado, y oraren, y buscaren mi rostro, y se
convirtieren de sus malos caminos; entonces yo oiré desde los cielos, y
perdonaré sus pecados, y sanaré su tierra.
Es tiempo de volvernos a
Dios, dejar de mirar tanto lo que nos muestran nuestros ojos y atender al
mensaje de Dios, atenderlo a Él, volver a emocionarnos con sus palabras,
conmovernos al entrar a su presencia y reconocer sobre todo su soberanía.
Dios te guie en su buen
camino y haga resplandecer su rostro sobre tu vida. Bendiciones
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