5 de Mayo del 2025
"Y cuando comenzaron a entonar cantos de alabanza, Jehová puso contra los hijos de Amón, de Moab y del monte de Seir, las emboscadas de ellos mismos que venían contra Judá, y se mataron los unos a los otros." 2 Crónicas 20:22.
Ojala que razonáramos menos acerca de nuestras turbaciones y cantáramos y alabáramos más! Hay millares de cosas que llevamos como si fuesen grilletes y que si supiéramos utilizarlas podríamos usarlas como instrumentos musicales.
Los hombres que reflexionan, meditan, se ocupan seriamente de los asuntos de la vida, estudian el desarrollo misterioso de la providencia de Dios y se preguntan si es justo que ellos estén agobiados, contrariados y embargados, qué diferentes y cuánto más dichosos serían, si en lugar de estar siempre tratando de favorecerse y pensando interiormente, tomasen y elevasen al Señor diariamente sus preocupaciones y alabasen a Dios por las mismas!
Cantando podemos desechar más fácilmente nuestras preocupaciones que razonando acerca de ellas. Canta por la mañana. Los pájaros son los que cantan más temprano, y no conozco a nadie que tenga menos preocupaciones que ellos.
Canta por la noche. Cantar es la última cosa que los petirrojos hacen. Al terminar su labor cotidiana, y después de dar su último vuelo y comer su último bocado, entonces en la parte más elevada de una ramita, cantan una canción de alabanza.
iOh, cantemos por la mañana y por la tarde, y que la primera nota de cada canto de alabanza y gratitud se junte al eco del himno anterior!
Imprimir artículo
No hay comentarios:
Publicar un comentario