"Y llegado a la casa, vinieron a él los ciegos; y Jesús les dijo: ¿Creéis que puedo hacer
esto? Ellos dijeron: Si, Señor." (Mateo 9:28.)
Dios obra con las imposibilidades. Para El nunca es demasiado tarde, si lo que es imposible se le lleva a Él con fé plena por aquel en cuya vida y circunstancias debe operarse lo imposible para que Dios sea glorificado. Aunque en nuestra vida haya habido rebeldía, incredulidad, pecado y desastre, nunca es demasiado tarde para que Dios trate con triunfo todos éstos hechos trágicos, si se les llevan a Él con una rendición y confianza completa. A menudo se ha dicho con verdad, que el Cristianismo es la única religión que puede tratar con el pasado del hombre. Dios puede "restituir . . . los años que comió la langosta" (Joel 2:25), y El hará ésto cuando pongamos sin reservas nuestra situación y nosotros mismos en Sus manos, pero creyendo. Y Él hará ésto, no por lo que nosotros somos, sino por lo que El es. Dios perdona, cura y restituye. El es, "el Dios de toda gracia." Alabémosle y confiémos en Él.
"Tenemos un Dios que se complace en las imposibilidades." No hay nada demasiado difícil para El.
Imprimir artículo
